¿Dónde viven las morsas?

Las moras (Odobenus rosmarus) son una especie de mamífero carnívoro semiacuático que sobresalen por su tamaño y sus enromes colmillos descubiertos, que pueden alcanzar hasta 1 m de longitud y son su característica más llamativa. Poseen una piel gruesa cubierta de pelos casi en su totalidad con excepción de las aletas que les brinda protección ante las condiciones climáticas extremas de su hábitat.

Los machos se distinguen de las hembras por ciertos nódulos que crecen en sus pieles a partir de la pubertad y son extremadamente territoriales. El color de su piel cambia según la temperatura, en aguas fría tiene tonalidades grises mientras que en ambientes más cálidos puede verse con tonalidades rosadas.

¿Dónde viven las morsas?

El área de distribución geográfica y los hábitats naturales de las morsas se encuentran limitados a las frías aguas del Océano Ártico; llegando a estar en zonas que apenas se relacionan entre sí. Se alimentan en aguas de hasta aproximadamente 250 m de profundidad, pero pasan la mayor parte del tiempo sobre la superficie helada del océano, en zonas costeras o promontorios rocosos donde se agrupan por miles. Hacen largas migraciones todos los años, pero sin alejarse demasiado del ártico. Se conocen dos subespecies de estos animales cuyo lugar de residencia oficial varía en cada caso:

• A la morsa del atlántico (Odobenus rosmarus rosmarus) se le puede encontrar en las aguas y zonas costeras de este océano cercanas a Groenlandia, en el noreste de Canadá y en el Archipiélago de Svalbard.
• Su prima, la morsa del Pacífico (Odobenus rosmarus divergens) es más común en los mares de Chukchi y de Bering, en la zona norte de Siberia, en el Mar de Beaufort, en el norte de Alaska y en la Isla de Wrangel.

¿Qué adaptaciones tienen las morsas para vivir en su hábitat?

• Piel. Las morsas tienen una piel gruesa cubierta de pelos que cubre una gruesa capa de grasa. Estas adaptaciones les permiten sobrevivir a las bajas temperaturas de su hábitat y a resistir el ataque de sus depredadores naturales.
• Colmillo. Estas estructuras son una herramienta muy útil a la hora de salir de agua helada, con ellos se sostienen del hielo para luego impulsarse hacia arriba. Los colmillos también les sirven para defender su territorio de otros machos y contra los abundantes depredadores de la región.
• Comportamiento. Las morsas se reúnen en rebaños grandes y por voluntad propia deciden permanecer muy unidas. Los científicos piensan que lo hacen para resistir mejor el frío y como un mecanismo de defensa ante los depredadores.
• Extremidades. Sus extremidades son similares a remos. Con ellas pueden moverse eficazmente dentro y fuera del agua.

¿Cómo proteger el hábitat de las morsas?

El hábitat natural de las morsas es una de las zonas más vulnerables de nuestro planeta debido a las acciones del hombre y a fenómenos provocados por este como el calentamiento global.  Este último provoca que estos a estos animales se les dificulte encontrar alimento, que cambien sus hábitos reproductivos, que dejen de migrar, incluso, que sus sistemas internos colapsen debido al calor. Así mismo los limita de la superficie helada del océano que les sirve de refugio cuando no están en el agua. Unido a ello el incremento de la intromisión humana en su área de distribución geográfica con equipamiento y vehículos que contaminan y hacen ruido, provoca que estos animales sufran de estrés y que se dañe aún más el ecosistema que les permite sobrevivir. Es por ello que se deben tomar medidas los protejan, entre ellas:

• Regular y limitar las actividades humanas en los lugares donde habitan las morsas. Incluso revisar el equipamiento óptimo para llevar a estos lugares.
• Promulgar leyes y revisar su cumplimiento que prohíban el vertimiento de basura y otras sustancias dañinas en el mar.
• Contribuir a las campañas y tareas que se organizan para reducir los efectos del calentamiento global.
• Diseñar reservas naturales y áreas protegidas para brindar seguridad a estos ecosistemas y sus especies.

Respuestas rápidas a preguntas frecuentes

Video: Morsas en su hábitat natural